Un comité del Senado tailandés recomendó al gobierno retirar el proyecto de ley sobre complejos de entretenimiento, argumentando que podría violar varios artículos de la Constitución de 2017. Según el Bangkok Post, el comité, presidido por el senador Veerapun Suvannamai, observó tras dos meses de revisión la falta de transparencia del proyecto, especialmente la falta de mención explícita de los casinos al inicio de su redacción. Esta omisión podría interpretarse como contraria a los principios estratégicos del país y podría ser impugnada ante el Tribunal Constitucional.
El comité también cuestionó la viabilidad económica de legalizar los casinos. Citó la opinión del Comité Nacional de Desarrollo Económico y Social. Advirtió que los ingresos globales de los casinos presentan una tendencia a la baja, lo que sugiere que entrar en la industria en este momento podría traer beneficios fiscales limitados. El comité también señaló que las ganancias en el mercado internacional de casinos tienden a favorecer a los operadores privados en lugar del Estado, lo que plantea dudas sobre las previsiones de ingresos del gobierno. Preocupación por el impacto social y el acceso público
A nivel social, el proyecto de ley ha sido criticado por establecer criterios de elegibilidad estrictos para los ciudadanos tailandeses, que exigen tener al menos 50 millones de baht (unos 1,3 millones de euros) en sus cuentas bancarias para acceder a los casinos. Según informes de medios locales, el comité del Senado cree que este umbral probablemente excluya a los jugadores clandestinos actuales, lo que reduciría la eficacia del proyecto de ley en la lucha contra el juego ilegal. Se espera que solo unas 10.000 personas cumplan los requisitos, y la preocupación pública crece sobre si el proyecto de ley puede resolver los problemas sociales o agravarlos.
La división de la coalición aumenta la incertidumbre política
Este hecho complica la situación política en el país del sudeste asiático y aumenta la incertidumbre sobre las perspectivas del proyecto de ley. La semana pasada, el Partido Bhumjaithai se retiró de la coalición gobernante, lo que redujo la mayoría del gobierno y generó incertidumbre sobre la aprobación del proyecto de ley cuando el parlamento se reanude el 3 de julio. El líder del Partido Bhumjaithai, Anutin Charnvirakul, afirmó que el partido no podía apoyar una política que, en su opinión, solo beneficiaría a unos pocos y perjudicaría los intereses de la sociedad en general. Citó la propuesta como una de las razones de la retirada del partido.
Tensiones fronterizas
Para agravar aún más el problema, se ha producido una reciente disputa diplomática relacionada con una llamada telefónica filtrada entre el primer ministro Paetongtarn Shinawatra y el exlíder camboyano Hun Sen. Las críticas de un general tailandés tras un enfrentamiento fronterizo mortal en la llamada dieron lugar a controles más estrictos en la frontera entre Tailandia y Camboya, lo que perturbó el comercio y el turismo regionales. Operadores como Donaco International, que gestiona un casino en Poipet, han informado de una caída en la actividad comercial debido a la disminución del turismo tailandés.